MERCEDES SOPHÍA RAMOS. Escritora Grupo ALAS

http://www.grupoalasmercedesramos.blogspot.com

jueves, 17 de febrero de 2022

REVISTA SOLERA N.º 144 "FINCA DE LA CONCEPCIÓN"


 

LA FINCA DE LA CONCEPCIÓN Y AMALIA HEREDIA LIVERMORE.

           CREADORA DEL JARDÍN DE LOS SUEÑOS

 

 

 

“TODA OBRA QUE SE CREA CON ILUSIÓN QUEDA PERMANENTE EN EL TIEMPO”

 

 

El nombre de Amalia Heredia Livermore es igual a decir: “Finca de la Concepción”, o más aún, es saber que cada una de las plantas, árboles, flores acuáticas, bambúes, lotos, cedros,  helechos, vides y palmeras monumentales, entre otras, está su imagen imperturbable. Las distintas especies plantadas componen uno de los jardines botánicos más importantes de Europa, todo ello, gracias a su empeño y plena dedicación durante gran parte de su vida. El esplendor singular de la finca se manifiesta en cada rincón, las luces y las sombras que ofrece su vegetación abundante y bella recorren nuestros sentidos muy hondamente, sorprendiendo la variedad de colores y matices que unen una perfecta armonía dentro del más exquisito lugar para pasear y echar a volar la imaginación del visitante.

Amalia nació en Málaga el año 1830, fue la décima hija de los doce hijos que tuvieron Agustín Heredia e Isabel Livermore, ella perteneció a las sagas de las grandes familias  del momento y de las que se tiene sobrados conocimientos, sobre todo, por la importancia comercial y económica que la impulsión y trascendencias de estas familias supuso para la ciudad de Málaga.                                                                                                              

 Dentro de ese círculo recibió una esmerada educación bajo los cuidados de profesores e institutrices, aprovechando todas esas posibilidades se  formó a una  joven culta y muy interesada en el patrimonio histórico de la Etapa Romana. Se decantó muy joven por ilustrarse con todo lo relacionado con el arte y la arqueología, al contrario de otras mujeres de la época Amalia aprendía incansablemente, consultaba libros y materias diversas que le proporcionaban a su fina inteligencia conocimientos nuevos, discreta y tenaz avanzaba en campos impensables para los cánones establecidos en esa época, las mujeres en el siglo decimonónico seguían reglas y compromisos  rígidos muy difícilmente eludibles, la sociedad no veía con buenos ojos que las mujeres destacasen en otro lugar distinto a sus labores cotidianos, esos quehaceres iban ligados directamente a tareas domésticas y familiares, todo lo que se saliera de ese ámbito se podía confundir con rarezas y extravagancias, sin embargo, la creación de Amalia estaba por llegar.

Amalia se enamoró tempranamente de Jorge Enrique Loring, hijo de una familia de élite con  las mismas características clasistas  de su familia, ambos contrajeron matrimonio en el año 1850. En el viaje de novios  viajaron por distintos países europeos, visitando fundamentalmente jardines de Italia, Suiza, Francia y Alemania, en esos paraísos ajardinados Amalia quedó fascinada por la flora variada que observó en cada paraje, especies y monumentos vegetales nunca vistos y que sorprendieron muy gratamente a la pareja, los paisajes coloristas; las veredas y rutas diseñadas para su contemplación; los ornamentos florales vivos y abundantes; los entornos plagados de arboledas en gamas diversas, todo ello  consiguió que Amalia diera vida a un interés inesperado y profundo por todo lo relacionado con la botánica. Si además, a todo ese escenario bello y luminoso se le sumaba el motivo de su viaje, que, promovía el halo invisible que creaba el amor añadiendo un precepto ineludible de esplendor.

Después de cinco años de casados, adquirieron los terrenos de la finca, en ella edificaron una serie de construcciones que decoraban con piezas arqueológicas  de distintas procedencias, la colección heterogénea de piezas alcanzó tal admiración que incluso crearon un pequeño museo dentro de la finca, lo más impactante de la colección Heredia -Loring fueron  las  tablas romanas: “Lex Flavia Malacitana”1*

Además de las distintas estancias edificadas se hace mayor mención a la casa- palacete inspirada en las casas americanas del momento, las decoraciones exteriores de los jardines con puentes de hierro, fuentes, miradores y cenadores daban al conjunto una perfecta y sincronizada hermosura.

Cuentan que para distribuir a los inmensos jardines de plantas traídas de todos los continentes se hacía una criba minuciosa de semillas y plantaciones, todo ello siempre estaba examinado por Amalia, ella contaba con la ayuda de un jardinero francés, Chamousst, experto en la creación y disposición de las plantas, él contaba con el clima apropiado de Málaga para el beneficio y crecimiento de plantas subtropicales y exóticas. La dedicación absoluta de Amalia al jardín fue tan esmerada, que, en uno de los viajes donde llevaba una variedad especial de plantas, se volvió repentinamente hacía las bodegas del buque para recoger una muestra de las mismas, y, llevarlas consigo dentro de su equipaje y a buen recaudo.

Una vez terminada la composición de la finca el matrimonio se reunía habitualmente con políticos y magistrados, siendo Amalia una buena tertuliana de temas gubernamentales y  de alto contenido social, tanto es así, que fueron visitados por la emperatriz Sissi y otras personalidades europeas de gran relevancia. La  reina Isabel II otorgó al matrimonio el título nobiliario de: Marqueses de la Casa Loring.

Siendo madre de cinco hijos, Amalia reunía tiempo para dedicarse a proyectos de diverso índole, la fundación del colegio de monjas de La Asunción, o el apoyo para construir hospitales y colegios. En los jardines del Hospital Civil  quedan algunas muestras de las plantaciones que ella misma eligió esmeradamente, lamentablemente ese bello jardín sirve hoy de aparcamiento sin que nadie tenga la iniciativa de rescatar su enorme potencial.

  Amalia Heredia Livermore, creadora del jardín de los sueños y marquesa de Loring, vivió una apasionada vida en la que pudo realizar gran parte de sus aspiraciones, falleció  en el año 1902. En su memoria perpetuar a la Finca de la Concepción es idéntico a recordar su nombre, su legado sigue fascinando hoy a todo visitante que identifica la “Finca de la Concepción” como el jardín al aire libre más importante del planeta.

 

                                                   1* Tablas de la etapa romana en Málaga, en ellas se establecían leyes elaboradas por Roma que concretaban una serie de normas específicas para Málaga.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario